miércoles, 22 de octubre de 2014

Oleaje inspirativo

Soy la roca que erosiona con las fuertes olas del mar

es un choque constante, como la tristeza a la vida,
y la gran roca que soy, 
cada vez más es disminuida. 
Cambio de forma con cada ola que llega y se topa conmigo,
el dolor es el de siempre, pero no me acostumbro a él,
cada ola es distinta, aunque no lo puedas ver.
A veces el mar está en calma,
y pienso que podré descansar,
pero comienza a llover, y una vez más 
me pregunto ¿y es que esto no va a parar?
A caso yo, roca firme 
que soporta cada latigazo de frío, 
cada baño de sal y rocío,
yo, roca simple y destrozada,
¿no puedo tener algo de alma?
Porque no soy una roca,
pero las olas llegan,
y la roca es inerte, 
pero yo no.
No soy fuerte.

1 comentario: